
Las 5 cosas más importantes que puedes hacer para protegerte contra el cáncer de pulmón
No hay manera de decir esto de una forma bonita: el cáncer de pulmón es uno de los cánceres más agresivos y mortales. Es la principal causa de muerte por cáncer en Estados Unidos, que afecta a aproximadamente uno de cada 13 hombres y una de cada 16 mujeres.
Pero aquí está el lado positivo: el cáncer de pulmón es altamente prevenible.
¿Qué es el cáncer de pulmón?
El cáncer de pulmón es una enfermedad que causa el crecimiento de células anormales en los tejidos de los pulmones y generalmente afecta las vías respiratorias de ambos pulmones.
¿Cuáles son los síntomas?
Cuando las células cancerosas se agrandan y comienzan a diseminarse, la persona puede experimentar tos con sangre, dificultad para respirar, pérdida de apetito, fatiga e infecciones
recurrentes. Si no se trata, casi siempre es fatal.
¿Quién está en riesgo?
Aquellos que tienen mayor riesgo de contraer cáncer de pulmón son:
- Fumadores (cigarrillos, cigarros, pipas).
- Quienes tienen antecedentes familiares de cáncer de pulmón.
- Personas con exposición prolongada al humo de segunda mano (humo de cigarrillos que otra gente fuma).
- Cualquier persona que haya estado expuesta a sustancias químicas como el radón, el asbesto, gases de diesel y otros productos químicos del lugar de trabajo.
Cuando decimos que las personas tienen un mayor riesgo de contraer una enfermedad, queremos decir que esas personas, debido a alguna combinación de estilo de vida o antecedentes familiares de la salud, pueden ser vulnerables. Sin embargo, tener varios factores de riesgo no significa que contraerás la enfermedad; a veces, las personas sin factores de riesgo también pueden contraer la enfermedad. Por eso es tan importante consultar regularmente a tu doctor y realizarte exámenes de detección.
Las cinco mejores maneras de protegerse
El cáncer de pulmón se ha considerado como uno de los cánceres más prevenibles, ya que entre el 80% y el 90% de todos los casos están relacionados con fumar cigarrillos. Estas son algunas de las formas en que puedes reducir tu riesgo de contraer esta enfermedad mortal.
1. No fumes, o si fumas, deja de hacerlo
Fumar es el factor número uno para contraer cáncer de pulmón, y no existe tal cosa como un “cigarrillo seguro”. Incluso aquellos cigarros que se anuncian como bajos en alquitrán, “ligeros” o mentolados aún tienen los mismos químicos que causan cáncer.
Dejar de fumar puede reducir drásticamente tus riesgos; en algunos casos, puede reducir tus riesgos a la mitad. Pídele a tu doctor información sobre cómo romper el hábito para siempre.
2. Evita el humo de segunda mano
Siempre y donde sea que puedas, mantente alejado de los cigarrillos, cigarros o pipas de otras personas y conserva tu hogar libre de humo.
3. Examina si tu casa tiene radón
El radón es un gas natural que proviene de las rocas y la tierra; puede quedar atrapado en casas y otros edificios. No necesitas un especialista para examinar tu casa o edificio: muchas tiendas de mejoras para el hogar tienen kits para la prueba de radón. Cada año, el Departamento de Salud Pública de California pone a disposición kits de prueba de radón gratuitos. Regístrate para obtener uno en 2019, o si vives en una propiedad de alquiler, pregúntale a tu arrendador.
4. Hazte una prueba si estás en riesgo
Si fumas, tienes antecedentes de cáncer de pulmón en tu familia o trabajas con productos químicos industriales, definitivamente debes hablar con tu doctor acerca de las opciones para hacerte la prueba.
La detección temprana del cáncer de pulmón puede salvar vidas. Cuanto antes lo identifique tu doctor, las posibilidades de ofrecerte el tratamiento adecuado son mejores.
5. Sigue una dieta saludable
Este es un gran consejo, incluso si no estás en riesgo. Una dieta saludable que sea baja en azúcares y grasas pero alta en granos enteros, proteínas magras y productos frescos también puede reducir tus riesgos de contraer enfermedades cardíacas, diabetes, una variedad de otros tipos de cáncer y mucho más.
Respira hondo... Existen muchas formas de protegerte contra el cáncer de pulmón, ¡y recuerda que AltaMed está aquí para apoyarte!
No hay manera de decir esto de una forma bonita: el cáncer de pulmón es uno de los cánceres más agresivos y mortales. Es la principal causa de muerte por cáncer en Estados Unidos, que afecta a aproximadamente uno de cada 13 hombres y una de cada 16 mujeres.
Pero aquí está el lado positivo: el cáncer de pulmón es altamente prevenible.
¿Qué es el cáncer de pulmón?

El cáncer de pulmón es una enfermedad que causa el crecimiento de células anormales en los tejidos de los pulmones y generalmente afecta las vías respiratorias de ambos pulmones.
¿Cuáles son los síntomas?

Cuando las células cancerosas se agrandan y comienzan a diseminarse, la persona puede experimentar tos con sangre, dificultad para respirar, pérdida de apetito, fatiga e infecciones
recurrentes. Si no se trata, casi siempre es fatal.
¿Quién está en riesgo?

Aquellos que tienen mayor riesgo de contraer cáncer de pulmón son:
- Fumadores (cigarrillos, cigarros, pipas).
- Quienes tienen antecedentes familiares de cáncer de pulmón.
- Personas con exposición prolongada al humo de segunda mano (humo de cigarrillos que otra gente fuma).
- Cualquier persona que haya estado expuesta a sustancias químicas como el radón, el asbesto, gases de diesel y otros productos químicos del lugar de trabajo.
Cuando decimos que las personas tienen un mayor riesgo de contraer una enfermedad, queremos decir que esas personas, debido a alguna combinación de estilo de vida o antecedentes familiares de la salud, pueden ser vulnerables. Sin embargo, tener varios factores de riesgo no significa que contraerás la enfermedad; a veces, las personas sin factores de riesgo también pueden contraer la enfermedad. Por eso es tan importante consultar regularmente a tu doctor y realizarte exámenes de detección.
Las cinco mejores maneras de protegerse
El cáncer de pulmón se ha considerado como uno de los cánceres más prevenibles, ya que entre el 80% y el 90% de todos los casos están relacionados con fumar cigarrillos. Estas son algunas de las formas en que puedes reducir tu riesgo de contraer esta enfermedad mortal.
1. No fumes, o si fumas, deja de hacerlo

Fumar es el factor número uno para contraer cáncer de pulmón, y no existe tal cosa como un “cigarrillo seguro”. Incluso aquellos cigarros que se anuncian como bajos en alquitrán, “ligeros” o mentolados aún tienen los mismos químicos que causan cáncer.
Dejar de fumar puede reducir drásticamente tus riesgos; en algunos casos, puede reducir tus riesgos a la mitad. Pídele a tu doctor información sobre cómo romper el hábito para siempre.
2. Evita el humo de segunda mano

Siempre y donde sea que puedas, mantente alejado de los cigarrillos, cigarros o pipas de otras personas y conserva tu hogar libre de humo.
3. Examina si tu casa tiene radón

El radón es un gas natural que proviene de las rocas y la tierra; puede quedar atrapado en casas y otros edificios. No necesitas un especialista para examinar tu casa o edificio: muchas tiendas de mejoras para el hogar tienen kits para la prueba de radón. Cada año, el Departamento de Salud Pública de California pone a disposición kits de prueba de radón gratuitos. Regístrate para obtener uno en 2019, o si vives en una propiedad de alquiler, pregúntale a tu arrendador.
4. Hazte una prueba si estás en riesgo

Si fumas, tienes antecedentes de cáncer de pulmón en tu familia o trabajas con productos químicos industriales, definitivamente debes hablar con tu doctor acerca de las opciones para hacerte la prueba.
La detección temprana del cáncer de pulmón puede salvar vidas. Cuanto antes lo identifique tu doctor, las posibilidades de ofrecerte el tratamiento adecuado son mejores.
5. Sigue una dieta saludable

Este es un gran consejo, incluso si no estás en riesgo. Una dieta saludable que sea baja en azúcares y grasas pero alta en granos enteros, proteínas magras y productos frescos también puede reducir tus riesgos de contraer enfermedades cardíacas, diabetes, una variedad de otros tipos de cáncer y mucho más.
Respira hondo... Existen muchas formas de protegerte contra el cáncer de pulmón, ¡y recuerda que AltaMed está aquí para apoyarte!
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Exámenes de la salud después de los 50
Incluso si has vivido una vida saludable, al llegar a los cincuenta años, aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como artritis, afecciones cardíacas, cáncer, diabetes e incluso depresión. Estas enfermedades pueden quitarte años de vida, así como afectar tu calidad de vida.
Hacerte exámenes regulares puede ayudarte a:
- Disminuir tu riesgo de contraer un padecimiento o enfermedad crónica.
- Ahorrar dinero en tus costos médicos, ya que las enfermedades crónicas requieren de una atención médica adicional.
- Retrasar o prevenir las enfermedades, al detectarlas en una etapa temprana y tratarlas.
Básicamente, hay muchas razones para que estés a cargo de tu salud, especialmente porque la mayoría de los planes de seguro, incluídos Medicaid y Medicare, cubren una gran parte de los servicios preventivos y exámenes de detección.
Conoce qué pruebas necesitas
Estas son algunas de las pruebas de detección más comunes que necesitas a partir de los 50 años de edad:
- Las mujeres deben hacerse una mamografía cada 2 años.
- Prueba de detección de cáncer colorrectal cada año.
- Exámenes regulares de diabetes.
- Pruebas de detección de trastornos de lípidos para controlar el colesterol en la sangre.
- Los exámenes de detección de osteoporosis deben comenzar a los 60 años para mantener los huesos sanos.
La mejor manera de mantenerte saludable y estar al día con tus exámenes, es hacerte revisiones médicas regulares. Dependiendo de tu sexo y tu historial de salud familiar, tu doctor puede recomendarte exámenes adicionales para la detección de enfermedades.
Llámanos para obtener más información sobre los exámenes de salud que necesitas al (888) 499-9303.
Incluso si has vivido una vida saludable, al llegar a los cincuenta años, aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como artritis, afecciones cardíacas, cáncer, diabetes e incluso depresión. Estas enfermedades pueden quitarte años de vida, así como afectar tu calidad de vida.
Hacerte exámenes regulares puede ayudarte a:
- Disminuir tu riesgo de contraer un padecimiento o enfermedad crónica.
- Ahorrar dinero en tus costos médicos, ya que las enfermedades crónicas requieren de una atención médica adicional.
- Retrasar o prevenir las enfermedades, al detectarlas en una etapa temprana y tratarlas.
Básicamente, hay muchas razones para que estés a cargo de tu salud, especialmente porque la mayoría de los planes de seguro, incluídos Medicaid y Medicare, cubren una gran parte de los servicios preventivos y exámenes de detección.
Conoce qué pruebas necesitas
Estas son algunas de las pruebas de detección más comunes que necesitas a partir de los 50 años de edad:
- Las mujeres deben hacerse una mamografía cada 2 años.
- Prueba de detección de cáncer colorrectal cada año.
- Exámenes regulares de diabetes.
- Pruebas de detección de trastornos de lípidos para controlar el colesterol en la sangre.
- Los exámenes de detección de osteoporosis deben comenzar a los 60 años para mantener los huesos sanos.
La mejor manera de mantenerte saludable y estar al día con tus exámenes, es hacerte revisiones médicas regulares. Dependiendo de tu sexo y tu historial de salud familiar, tu doctor puede recomendarte exámenes adicionales para la detección de enfermedades.
Llámanos para obtener más información sobre los exámenes de salud que necesitas al (888) 499-9303.

Conoce los conceptos básicos sobre la prevención de la diabetes
¿Sabías que una de cada tres personas en los Estados Unidos tiene diabetes, prediabetes o niveles peligrosos de resistencia a la insulina? Tú puedes combatir la diabetes o evitarla por completo llevando un estilo de vida saludable y haciéndote exámenes de rutina. Aprende a mantenerte sano y evalúa tus riesgos
¿Qué es la diabetes?
La diabetes es una enfermedad que debilita la capacidad del cuerpo para convertir el azúcar en energía. Normalmente, el páncreas produce una hormona llamada insulina para ayudar a estabilizar la cantidad de azúcar en la sangre. Cuando la persona tiene diabetes, el cuerpo no puede producir suficiente insulina o ya no responde a la insulina producida, lo que conduce a una cantidad peligrosa de azúcar en el torrente sanguíneo. Como resultado, las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades cardíacas, insuficiencia renal, derrame cerebral y pérdida de la visión.
Estos son los tipos más comunes de diabetes:
La diabetes tipo 1 es más grave (y rara):
- Típicamente se desarrolla durante la infancia pero puede comenzar a cualquier edad.
- No puede ser curada ni prevenida.
- Requiere inyecciones de insulina, generalmente en cada comida o merienda.
- También exige que se midan los niveles de azúcar en la sangre frecuentemente.
La diabetes tipo 2 se puede prevenir pero sigue siendo grave (y es muy común):
- Es común en adultos mayores de 45 años, pero ahora comenzamos a ver que se presenta en edades más jóvenes.
- Está relacionada con la obesidad o sobrepeso, la mala alimentación, falta de actividad física y antecedentes familiares de la salud.
- Generalmente requiere medicamentos orales o una inyección diaria de insulina.
- ¡Se puede curar con un estilo de vida saludable!
¡Mantente proactivo y saludable!
Si te dijeron que eres prediabético o estás controlando la diabetes, un estilo de vida saludable ayudará a prevenir las complicaciones y reducirá el impacto que la enfermedad puede causar en tu vida. Más que nada, un estilo de vida sano puede ayudar a prevenir la diabetes. Aquí tenemos algunas maneras de reducir tus riesgos y cuidar tu salud a largo plazo.
Hazte la prueba regularmente
Los análisis de azúcar en la sangre y el colesterol, las pruebas del riñón, los exámenes de los pies y los ojos, así como la revisión de la presión arterial pueden ayudar a prevenir o retrasar las complicaciones de salud.
Mantente activo
Además de ayudarte a controlar el riesgo del padecimiento de la diabetes, el ejercicio regular te ayuda a mantener un peso saludable y a combatir el estrés. Encuentra una actividad que disfrutes y comienza gradualmente: sal a caminar, ponte a bailar, trabaja en el jardín, toma clases o sigue un video de ejercicios. Si nunca antes has hecho ejercicio, estos consejos pueden ser un buen comienzo.
Si tienes diabetes, trae contigo un refrigerio sano en caso de que el azúcar en la sangre disminuya, y asegúrate de revisar tus niveles de azúcar en la sangre antes y después de hacer ejercicio.
Mantén una dieta saludable
Comer bien es importante para la prevención y el control de la diabetes. Elegir una variedad de alimentos saludables le da a tu cuerpo la nutrición y la energía que necesita.
- Come muchas frutas, verduras y granos enteros.
- Siempre que sea posible cambia los alimentos fritos por alimentos asados.
- Bebe agua en lugar de bebidas azucaradas (como refrescos, refrescos de dieta y jugos).
- Conoce qué alimentos tienen un alto contenido de carbohidratos (por ejemplo, tortillas, papas y arroz) para que los comas con moderación.
- Evita beber alcohol.
- Evita fumar.
También debes administrar tus porciones de comida y controlar tus niveles de azúcar. Es posible que debas hacer equipo con tu médico y con tu dietista para crear un plan de comidas que te beneficie.
Estar alerta a los síntomas y tomar medidas
Si comienzas a experimentar alguno de estos síntomas, consulta a tu doctor inmediatamente.
- Tener sed o hambre todo el tiempo sin ninguna explicación puede ser un síntoma de diabetes.
- Las infecciones frecuentes y las heridas con una cicatrización lenta son señales de advertencia de que posiblemente padezcas una enfermedad que afecta a tu sistema inmunológico, como la diabetes.
- El hormigueo en las manos y pies puede ser un signo de flujo sanguíneo deficiente relacionado con la diabetes y de daño a los nervios. Si actúas temprano, los efectos pueden ser solo temporales.
- Los cambios en la visión, como no poder enfocar o la visión borrosa pueden ser signos de diabetes. Si tienes diabetes, asegúrate de que te revisen la vista con regularidad e informa a tu doctor sobre tu condición.
Cómo te puede ayudar AltaMed si tienes diabetes
En AltaMed, ofrecemos una amplia gama de servicios dentro de nuestros centros, que incluyen análisis de azúcar en la sangre, exámenes oculares de la retina y clases gratuitas de educación para la salud. El personal farmacéutico de AltaMed pueden ayudarte a administrar tus medicamentos. Para obtener más información o para hacer una cita, llámanos al (888) 499-9303.
¿Sabías que una de cada tres personas en los Estados Unidos tiene diabetes, prediabetes o niveles peligrosos de resistencia a la insulina? Tú puedes combatir la diabetes o evitarla por completo llevando un estilo de vida saludable y haciéndote exámenes de rutina. Aprende a mantenerte sano y evalúa tus riesgos
¿Qué es la diabetes?
La diabetes es una enfermedad que debilita la capacidad del cuerpo para convertir el azúcar en energía. Normalmente, el páncreas produce una hormona llamada insulina para ayudar a estabilizar la cantidad de azúcar en la sangre. Cuando la persona tiene diabetes, el cuerpo no puede producir suficiente insulina o ya no responde a la insulina producida, lo que conduce a una cantidad peligrosa de azúcar en el torrente sanguíneo. Como resultado, las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades cardíacas, insuficiencia renal, derrame cerebral y pérdida de la visión.
Estos son los tipos más comunes de diabetes:
La diabetes tipo 1 es más grave (y rara):
- Típicamente se desarrolla durante la infancia pero puede comenzar a cualquier edad.
- No puede ser curada ni prevenida.
- Requiere inyecciones de insulina, generalmente en cada comida o merienda.
- También exige que se midan los niveles de azúcar en la sangre frecuentemente.
La diabetes tipo 2 se puede prevenir pero sigue siendo grave (y es muy común):
- Es común en adultos mayores de 45 años, pero ahora comenzamos a ver que se presenta en edades más jóvenes.
- Está relacionada con la obesidad o sobrepeso, la mala alimentación, falta de actividad física y antecedentes familiares de la salud.
- Generalmente requiere medicamentos orales o una inyección diaria de insulina.
- ¡Se puede curar con un estilo de vida saludable!
¡Mantente proactivo y saludable!
Si te dijeron que eres prediabético o estás controlando la diabetes, un estilo de vida saludable ayudará a prevenir las complicaciones y reducirá el impacto que la enfermedad puede causar en tu vida. Más que nada, un estilo de vida sano puede ayudar a prevenir la diabetes. Aquí tenemos algunas maneras de reducir tus riesgos y cuidar tu salud a largo plazo.
Hazte la prueba regularmente

Los análisis de azúcar en la sangre y el colesterol, las pruebas del riñón, los exámenes de los pies y los ojos, así como la revisión de la presión arterial pueden ayudar a prevenir o retrasar las complicaciones de salud.
Mantente activo

Además de ayudarte a controlar el riesgo del padecimiento de la diabetes, el ejercicio regular te ayuda a mantener un peso saludable y a combatir el estrés. Encuentra una actividad que disfrutes y comienza gradualmente: sal a caminar, ponte a bailar, trabaja en el jardín, toma clases o sigue un video de ejercicios. Si nunca antes has hecho ejercicio, estos consejos pueden ser un buen comienzo.
Si tienes diabetes, trae contigo un refrigerio sano en caso de que el azúcar en la sangre disminuya, y asegúrate de revisar tus niveles de azúcar en la sangre antes y después de hacer ejercicio.
Mantén una dieta saludable

Comer bien es importante para la prevención y el control de la diabetes. Elegir una variedad de alimentos saludables le da a tu cuerpo la nutrición y la energía que necesita.
- Come muchas frutas, verduras y granos enteros.
- Siempre que sea posible cambia los alimentos fritos por alimentos asados.
- Bebe agua en lugar de bebidas azucaradas (como refrescos, refrescos de dieta y jugos).
- Conoce qué alimentos tienen un alto contenido de carbohidratos (por ejemplo, tortillas, papas y arroz) para que los comas con moderación.
- Evita beber alcohol.
- Evita fumar.
También debes administrar tus porciones de comida y controlar tus niveles de azúcar. Es posible que debas hacer equipo con tu médico y con tu dietista para crear un plan de comidas que te beneficie.
Estar alerta a los síntomas y tomar medidas

Si comienzas a experimentar alguno de estos síntomas, consulta a tu doctor inmediatamente.
- Tener sed o hambre todo el tiempo sin ninguna explicación puede ser un síntoma de diabetes.
- Las infecciones frecuentes y las heridas con una cicatrización lenta son señales de advertencia de que posiblemente padezcas una enfermedad que afecta a tu sistema inmunológico, como la diabetes.
- El hormigueo en las manos y pies puede ser un signo de flujo sanguíneo deficiente relacionado con la diabetes y de daño a los nervios. Si actúas temprano, los efectos pueden ser solo temporales.
- Los cambios en la visión, como no poder enfocar o la visión borrosa pueden ser signos de diabetes. Si tienes diabetes, asegúrate de que te revisen la vista con regularidad e informa a tu doctor sobre tu condición.
Cómo te puede ayudar AltaMed si tienes diabetes
En AltaMed, ofrecemos una amplia gama de servicios dentro de nuestros centros, que incluyen análisis de azúcar en la sangre, exámenes oculares de la retina y clases gratuitas de educación para la salud. El personal farmacéutico de AltaMed pueden ayudarte a administrar tus medicamentos. Para obtener más información o para hacer una cita, llámanos al (888) 499-9303.