¡El verano ha llegado! Diviértete bajo el sol sin dejar de cuidar tu salud. Compartimos algunos hábitos que puedes adoptar para mantenerte sano durante esta temporada.

Toma agua. Es importante para prevenir la deshidratación, golpes de calor y otras complicaciones. Evita tomar bebidas con alto contenido de azúcar y calorías, como jugos y refrescos. En su lugar, toma un vaso de agua fría varias veces al día. Si gustas, puedes agregar un toque de limón o pepino para tener un sabor más refrescante.

Come ligero. Una dieta ligera te ayudará a mantenerte hidratado y esbelto este verano. Acompaña tus platillos de carne con frutas y verduras de temporada. Estos tienen más sabor y se pueden encontrar fácilmente en el mercado local. Disfruta tu fruta favorita en una ensalada o refréscate comiendo frutas y verduras con alto contenido de agua. Se creativo con tus licuados para mantenerte en forma todo el verano.

¡Mantente activo! Convierte actividades divertidas al aire libre en rutinas de ejercicio. Esta es la mejor época del año para andar en bicicleta, ir a nadar, caminar o simplemente jugar al aire libre. Mientras más juegues este verano, tu cuerpo quemará más calorías y desarrollará músculo. Encuentra una actividad que te guste y practícala un par de veces a la semana.

Protege tu piel. Una muy buena manera de obtener vitamina D es estar al aire libre pero es peligroso que la piel esté expuesta a los rayos UV del sol por varias horas. Para prevenir esto, aplica protector solar en tu piel, protege tus ojos con lentes de sol, permanece en la sombra y usa ropa ligera que cubra tu piel del sol.

¡Crece sano este verano, por dentro y por fuera!